Hoy que me pesa pensar…

si septiembre hubiese perdido algún color, quizás tú y yo tampoco sabríamos a primavera

cuando octubre rimó en tercera con nube, el cuaderno abierto se perdió en el armario -de tus besos

si el olor tuviese memoria, te volvería a pedir mildoscientas veces, «enciendeme otra vez aquella historia»

Pero ahora entiendo que el amarillo fue siempre el hilo del que tiran los recuerdos y el otoño, solo otra excusa para levantarse con sueño.


Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s