Contamos y escuchamos historias por la propia necesidad humana de sobrevivir.

«Mi ricordo» son trozos de vídeo desde un lugar de Sicilia en el que, algunas tardes, un grupo de personas comparten historias sobre el mar, el sufrimiento y la nostalgia.

A Sicilia, y especialmente durante el verano, llegan cada semana miles de personas a través del mar, agolpados en barcazas inseguras, desde ese infierno que es Libia. Llegan, la mayoría de las veces, después de ser manejados por las mafias, que los encierran durante semanas sin comida, sin apenas agua. Sin palabras.

En la residencia de ancianos Casa Valdese di Vittoria abrieron sus puertas para apoyar la falta de espacios donde poder acoger a todas estas personas que llegan huyendo. Hoy conviven allí personas mayores italianas con personas migrantes en busca de refugio.

Con Cine sin Autor, nos pasamos unas semanas construyendo con todos ellos una especie de relato colectivo. Construí «Mi ricordo» con algunos de los vídeos del making off que quedaron de aquel proceso para mostrar un relato visual paralelo sobre la necesidad, básica, fundamental, que todas tenemos de contar nuestra propia historia. De sobrevivir a través de nuestro relato, de curar heridas del pasado y de escuchar el relato del otro para seguir construyendo esa especie de puente invisible que nos une a los demás.

Gracias a Fernando y a todos las y los compañeros de DOCULENS por ayudarme a cubrir esta necesidad permanente de contar y escuchar, de compartir historias, a lo largo de todo este año.