Dos proyectos distintos, la misma idea. Miles de personas, miles de historias. La misma vida en un solo día.
«One day in a LIfe» y «One Day on Earth» son dos proyectos documentales que parten de la misma idea: que personas de todo el mundo participen rodando su vida en un día concreto para crear después el documental de la vida en ese mismo día.
La idea es similar y aunque los dos son documentales crowsourced las diferencias son importantes.
«One day in a life» es un proyecto que surge del ya aclamado director Kevin MacDonald (al frente de películas como «El último rey de Escocia») con la colaboración de Youtube, National Geographic y la producción ejecutiva del potentísimo Ridley Scott (por no nombrar su larga lista de éxitos, mencionaré apenas su gran Blade Runner). El proyecto surge por tanto con mucho apoyo, con la idea de demostrar que, independientemente del lugar de donde lleguemos, hacia donde vayamos y a qué grupo o clase pertenezcamos, hay pocas cosas importante que nos hagan diferentes. Desde Youtube, MacDonald animó a enviar vídeos desde todo el mundo grabados el mismo día, el 24 de julio de 2010. La película, que ya se puede ver entera en Youtube y que recogió más de 4.500 horas de vídeo enviadas por 80 mil personas de 192 países, no ha parado de recoger premios y alabanzas en multitud de festivales de todo el mundo.
«One day on earth» es un proyecto mucho más modesto pero, ni menos ambicioso ni menos emocionante. Kyle Ruddick y Brandon Litman, también dedicados al cine pero sin una milésima parte de reconocimiento, lanzaron el proyecto en 2008 (parece ser que antes que la idea de MacDonald) para recoger la vida en los cinco continente en un mismo día, el 10 de octubre de 2010. El proyecto, en el que también colaboran organizaciones humanitarias, pretende servir además como base fílmica para el uso y disfrute de cualquier persona. Este año han vuelto a lanzar la iniciativa con más apoyos (el canal de vídeo Vimeo y Naciones Unidas) y recogerá los pequeños y grandes momentos que las personas vivieron el 11 de noviembre de 2011, esa gran fecha.
La excusa de los dos proyectos, como la excusa que buscamos -y busco- todos los días, no es otra que celebrar y compartir lo impresionantemente espectacular que puede ser la vida. Y que a pesar de los pesares siempre gana, día tras día.