Hay cosas que ya sabes. Sabes que hay veces que tengo tantas ganas de contarte que marco tu número sabiendo que me vas a venir con lo de apagado o fuera de cobertura. No acabo de acostumbrarme. Las cosas siguen y tardan en cobrar sentido cuando no te las cuento.
Siempre has sido el primero. Ya pasará – me decían- tal vez cuando te enamores o quizás cuando ya no crezcas. Pero ya era de hace tiempo lo de dejar de estirar centímetros, algún amor me había partido el camino y los amigos ya eran mi vida. Pero ahí seguías tú, siendo. El primero para contarlo todo y tantas veces nada, para encontrar una sonrisa, buscarle el olor azul del cielo o asegurarme de que ser y estar eran casi siempre lo mismo.. O quizás sólo porque sabía que me conocías, te conocía y que aún así, nadie me iba a querer nunca tanto.
Y luego aquel día. Me llamaron, yo fui y tú ya estabas en alguna parte. Casi un mes sin dar respuesta, teléfono apagado y yo sin cobertura, te hablaba desde un cuaderno naranja y aquellos días saben ahora como las 101 vidas que ya tenía a mis espaldas. Y me dijeron algo de un derrame cerebral, de una vida que cambiaba, de que nada sería ya lo mismo. Yo no escuchaba, habíamos quedado en que te lo tenía que contar yo o que ya te lo escribiría.
Y después lloramos, subimos de nuevo a la superficie y volvimos a guardar la respiración. Hicimos muchos largos y se hacía de noche. Y aquí estamos ahora, ya de día, luchando y volviendo a reír. Ser y estar, ya sabes, casi siempre lo mismo.
Hay veces que te encuentro en una expresión, a veces veo como mueves la pierna que se quedó del lado del brazo, a veces me preguntas. A veces pienso que eres más tú que nunca. Pero otras veces me rindo, bajo de nuevo al fondo y cojo aire. Y luego subo y sigues siendo el primero. Porque ahora ya entiendo que poco importa lo que fuimos -estás aquí- tal vez nos estamos conociendo pero recuerdo aquello de que nadie me va a querer nunca tanto.
Por eso te escribo, en el tren, para cuando me leas o para cuando no quieras que te lo cuente. Felicidades papi, hoy es nuestro día.
BO-NI-TO
MUY BONITO! EMOCIONANTE!
Simplemente magnifico
Me han encantado tus palabras.
Me parece que puedo llegar a respirar ese aire que coges con tanta fuerza. La respiro cada día… la fuerza que irradias… y ahora, la que irradian tus palabras.
Marivolloso…